Agradeciendo el espacio que le dieron para trabajar por su pueblo, el conocido militante de Alianza Para el Progreso (APP) en Alto Trujillo, Fernando Nuñuvero Ibañez, dio a conocer su renuncia a este partido político que lo albergó durante varios años y por el que fue alcalde del entonces centro poblado y después regidor del distrito de El Porvenir.
Su alejamiento de la militancia obedece a que APP dejó de ser el partido cuya doctrina abrazó y defendió, siendo testigo de cómo se pisotea y se deja de lado los principios en los cuales deberían guiarse y fortalecer su accionar los nuevos líderes políticos. “Esta no es la forma que elegí para hacer política”, dijo.
Señaló que APP ya no es humanistas y que como proviene de una familia de condición muy humilde no puede tolerar que, en Alto Trujillo, la alta dirección promueva y fortalezca acciones disfrazadas de asistencialismo o “humanitarias”, que obligan al apoyo político, condicionando la militancia y denigrando la dignidad de las personas más humildes por quienes se debería trabajar con el mayor de los respetos.
“Ya no hay democracia interna, ya no hay descentralismo”, dijo, recordando que años atrás en Alto Trujillo existían los comités políticos en cada barrio o sector, donde en asambleas o reuniones se tomaban por consenso las mejores decisiones, acorde a la realidad, problemática, social y política.
Era la militancia quien elegía o nombraba a sus representantes. Para ser candidato a Alcalde del centro poblado me hicieron caminar por varios sectores, para evaluar el respaldo de la población; y para ser candidato a regidor distrital me sometí a una elección interna a mano alzada, ahora todo lo deciden entre cuatro paredes y solo se presta atención a los ayayeros y sobones. “La militancia ya no cuenta», aseguró.
Fernando Nuñuvero presentó su renuncia a la militancia de APP el pasado 10 de enero y el Jurado Nacional de Elecciones le acaba de notificar que la aceptó y ya no está afiliado a ningún partido político.
Señala que quiso hacer esto de conocimiento público por respeto y gratitud a todos y a cada uno de las personas que a lo largo de estos casi 21 años de trabajo o trayectoria política le brindaron su apoyo, confianza y respaldo.
“Vivimos momentos de mucho trabajo, sacrificios, momentos difíciles, lágrimas y también de celebración, hoy puedo decir que aprendí mucho de ustedes”, manifestó, agradeciendo a César Acuña Peralta y a quienes lo forjaron en la doctrina partidaria -que ahora ya no están en APP- bajo los principios humanista, descentralista y democrático.
Siempre que me tocó desempeñar un cargo representando a APP, juré por los principios del partido y mi lealtad al presidente fundador, porque eso era la razón de mi existencia en Alianza Para el Progreso. Hoy recuerdo a grandes personas y seres humanos de quienes aprendí y con quienes compartí el quehacer político, siempre pensando en servir de la mejor manera, a todos ellos mi eterna gratitud por la confianza y el apoyo brindado, añadió.
Indicó que fue un fiel y aguerrido soldado apepista y que muchas veces depuso actitudes o legítimas aspiraciones personales, pensando en lo mejor para el partido. Trabajé con responsabilidad y transparencia, con respeto a la dignidad de las personas, siempre buscando que mis acciones y actitudes den mayor realce al partido y ganar la confianza de la población. Nunca estuve envuelto en actos de corrupción ni escándalos, siempre trabajé para dar ejemplo y dejar un legado a los jóvenes de mi pueblo que abrazaron el cariño y la militancia por APP.
A las amistades que forjé en esta casa partidaria le dejó mi gratitud y les deseo lo mejor en el ámbito personal y profesional. Como vecino y ciudadano, ahora sin camiseta política, seguiré pendiente de la problemática de Alto Trujillo, estando presto a trabajar con todos quienes deseen contribuir a mejorar las actuales condiciones de vida de la población, agregó.
