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Elección de nombres es potestad de padres, señala vocera de entidad. El Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) dio a conocer cuáles son los nombres más comunes que obran en sus registros vinculados a personajes de terror.    

A pocas horas de celebrarse la fiesta de Halloween, el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) dio a conocer cuáles son los nombres más comunes que obran en sus registros vinculados a personajes de terror.

La lista difundida por la entidad la encabeza Damian, con 13 mil 572 peruanos que llevan ese nombre, el cual recuerda a uno de los principales personajes de la película de terror “La Profecía”.

En segundo lugar está Jason, recordado por el largometraje “Viernes 13”: 3 mil 648 personas han sido registrados con ese nombre. Y en tercer lugar aparece Tiffany (coprotagonista del malévolo muñeco Chucky) con 444 personas registradas así en Reniec.

La lista continúa con Merlina, Anabelle, Lucifer, Frankenstein, Chucky, Ritual, entre otros, como sigue a continuación:

De igual manera, el apellido más común que tenemos para el Día de la Canción Criolla es Criollo, aunque también obra en los registros personas apellidadas Vals y Marinera.

Angie Morales, vocera del Reniec, sostuvo que la elección de los nombres de los hijos es de libre albedrío de los padres; sin embargo, cuando es ofensivo para una persona, el registrador civil no lo acepta. «El registrador guía al ciudadano para que le ponga el nombre más adecuado».

Estimó que a muchos padres puede haberles marcado las películas de terror que vieron en su niñez y juventud y probablemente han desarrollado simpatía por algunos de los personajes, por lo que decidieron bautizar así a sus hijos.

«Cada vez que hay algo que se pone de moda, empiezan a aparecer en los registros civiles (del Reniec). Lo mismo pasó con Messi, Ronaldo y Harry Potter. Esto es muy frecuente en provincias», dijo en Radio Nacional.

Morales dijo que siempre será necesario pensar en las consecuencias de los nombres que los padres de familia colocan a sus hijos. «Más adelante, cuando el niño esté grande y debe hacer un trámite legal, puede tener algún problema, quizá no le creen. Siempre hay que tener un poco de seriedad a la hora de poner los nombres».

Finalmente, refirió que la única manera de cambiar el nombre de una persona es mediante un trámite por vía judicial.

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